Hosting, es el servicio que hace posible que tu sitio web sea visible en internet, proporcionando el espacio y los recursos necesarios para funcionar correctamente. Elegir uno de los mejores hosting es determinante para garantizar la disponibilidad y seguridad de tu página.
En esta guía te presento lo que necesitas conocer sobre el alojamiento web y que puedas elegir el que más te convenga.
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Existe hosting para muchos tipos de proyectos; sitios web, apps y bases de datos, entre otros. Esta guía se centra en el hosting para páginas web, que es el más habitual.
Entonces, ¿qué es el hosting web? Bueno, en términos sencillos, un hosting web es el servicio que permite que tu sitio web esté accesible para tus visitantes.
Puedes pensar en un proveedor de hosting como un hotel. Al igual que un hotel aloja a sus huéspedes en habitaciones, un servidor de hosting o alojamiento web aloja a los sitios web en su “espacio”. En resumen, el alojamiento web es la casa de tu sitio web en la vasta ciudad de internet.
Pero un buen servicio de alojamiento web no solo almacena tu sitio. También provee tecnología y recursos para un funcionamiento seguro y eficiente, manteniendo el servidor operativo y la transferencia de datos segura. Es decir, asegura que tu web esté disponible cuando un usuario la abre en su navegador y evita que los ciberdelincuentes la ataquen.
La elección de un hosting adecuado es clave para la disponibilidad y rendimiento de tu sitio web, influyendo en la experiencia del usuario y el SEO. Un hosting confiable garantiza accesibilidad constante y tiempos de carga rápidos, esenciales para retener visitantes y generar oportunidades de negocio.
Por otro lado, un mal alojamiento web puede resultar en:
Ahora que entendemos la importancia del hosting, veamos los tipos de alojamiento disponibles, similares a diversos hogares como apartamentos, pisos compartidos o casas. Analizaremos el alojamiento compartido, VPS, dedicado y en la nube, cada uno con sus ventajas según el tamaño y necesidad del proyecto online.
Empezaremos con el alojamiento web compartido, se asemeja mucho a compartir un piso con otra gente. Como su nombre indica, en un hosting compartido, varios sitios web comparten los mismos recursos de un servidor. Es una opción económica y es ideal para sitios web personales o pequeñas empresas con tráfico limitado.
Algunos proveedores de hosting compartido utilizan discos SSD (un tipo de almacenamiento más rápido que los discos duros tradicionales) y ofrecen herramientas de optimización que contribuyen a la velocidad y la fiabilidad del servicio de alojamiento. Vamos, que hay alojamiento compartido mejores que otros.
Sin embargo, el hosting compartido tiene sus desventajas. La principal es que el rendimiento de tu sitio web puede verse afectado por otros sitios y aplicaciones web alojados en el mismo servidor que consumen demasiados recursos. Así que, aunque es una opción asequible y fácil de usar, no es la más adecuada para sitios web con altos picos de tráfico.
El precio del alojamiento web compartido va de los 6 € al mes hasta los 400 € mensuales aproximadamente.
Un VPS, o Servidor Privado Virtual, es un tipo de hosting que se sitúa entre el hosting compartido y el dedicado (leer abajo). En un VPS, tu página web todavía comparte un servidor con otros sitios, pero tiene su propio espacio dedicado y recursos garantizados, similar a tener tu propio piso en un edificio de apartamentos.
Esto significa que, por lo general, el hosting VPS puede absorber más tráfico que el hosting compartido, y tu sitio no se verá afectado por los problemas que puedan tener otros sitios en el servidor. Además, como es tu propio servidor (virtual), puedes configurarlo acorde a tus necesidades.
Por lo general, este tipo de hosting está dejando de ser tan popular como era, ya que existen alojamientos compartidos muy buenos si necesitamos mayor servicio.
El hosting VPS combina las ventajas de un servidor dedicado con un precio más accesible, aunque su administración puede requerir conocimientos técnicos y es más caro que el alojamiento web compartido.
El alojamiento VPS arranca en unos 45 € al mes. Pero dependiendo de lo que necesites, el precio puede subir bastante, hasta varios cientos de euros por mes.
¿Quién no querría tener su propia casa? El equivalente en el mundo del hosting es uno dedicado.
En lugar de compartir recursos con otros sitios web, tienes un servidor entero para tu proyecto en exclusiva. Esto proporciona el máximo nivel de rendimiento, control y seguridad, y es ideal para sitios web de empresas grandes con mucho tráfico (p.ej., más de 1 millón de visitas al mes), y demandas exigentes de rendimiento. Además, al no compartir espacio con otros, reduce la exposición a riesgos de seguridad cibernética.
Por supuesto, tener tu propio servidor dedicado tiene un coste elevado. Es la opción de hosting más costosa y puede ser un desafío en términos de configuración y mantenimiento. Sin embargo, si tu sitio web requiere un alto rendimiento y seguridad, las ventajas de un alojamiento dedicado pueden superar su costo.
Un plan de hosting dedicado en un proveedor decente te costará más de 400 € al mes, pudiendo llegar a 1.000 € o 2.000 € mensuales.
Finalmente, tenemos planes de hosting en la nube. Surgió hace menos tiempo y se está volviendo cada vez más popular por su flexibilidad y escalabilidad. En lugar de alojar tu sitio web o blog en un solo servidor, los proveedores de hosting cloud pueden distribuir tu sitio en varios servidores interconectados. Esto significa que si uno de los servidores se cae, los demás pueden compensar la pérdida de recurs
Si bien el hosting en la nube ofrece muchas ventajas, también tiene sus desventajas. En primer lugar, puede ser más costoso que otras opciones de servicios de hosting y su precio puede variar en función del consumo de recursos. Además, la gestión de un hosting cloud puede requerir conocimientos técnicos avanzados. Si tienes un sitio pequeño o mediano tendrás suficiente con un hosting compartido y una CDN.
Con un servicio de alojamiento web en la nube, los precios comienzan entre 40 € y 50 € mensuales. Sin embargo, si añades más recursos, como CPU, RAM o espacio, el costo puede aumentar considerablemente, casi sin límite.
Seleccionar el proveedor de alojamiento correcto es fundamental para el rendimiento y la estabilidad de tu página web. Es una decisión que no solo afecta la disponibilidad de tu página, sino también la experiencia de tus visitantes. Aquí tienes una lista resumida de lo que debes considerar para hacer una elección acertada:
Un aspecto a menudo pasado por alto del alojamiento es su impacto en el SEO y la velocidad de carga de tu página web. Google considera la velocidad de carga de un sitio web como un factor para el posicionamiento en los resultados de búsqueda. Por lo tanto, elegir un proveedor de hosting con servidores rápidos y baja latencia puede mejorar la experiencia del usuario y tu posición en los resultados de búsqueda.
Por otro lado, un tiempo de inactividad de la máquina del servidor puede afectar negativamente el SEO al interferir con el rastreo de los bots de búsqueda y la indexabilidad del sitio; las interrupciones en el servicio son realmente malas para tu sitio web. Por eso, es importante consultar pruebas de disponibilidad sobre el hospedaje que estés valorando.
Además de un buen alojador, también necesitarás un nombre de dominio.
Un nombre de dominio es la dirección que los usuarios escriben en su navegador para acceder a tu sitio web. Mientras que el hosting es donde se almacenan los datos y archivos de tu sitio web, el dominio es cómo los usuarios encuentran tu sitio en la vasta ciudad de internet.
Es posible adquirir un nombre de dominio y una cuenta de hospedaje con el mismo proveedor o con proveedores diferentes, lo que ofrece flexibilidad en la gestión de la presencia online.
Tener un nombre de dominio propio no solo mejora la reputación online, sino que también ofrece la posibilidad de crear cuentas de correo electrónico personalizadas ilimitadas, reforzando la imagen corporativa. La mayoría de proveedores de alojamiento web incluyen los servicios de hosting de tu correo electrónico también, aunque con otros hay que contratarlo por separado.
Si estás utilizando aplicaciones como WordPress, puedes considerar un plan de hosting especializado. Estos servicios están optimizados para la plataforma que estás utilizando y pueden ofrecer mejor rendimiento y mayor facilidad de uso.
Por ejemplo, algunos proveedores de servicios de hosting ofrecen planes especializados para WordPress que incluyen opciones como funciones de optimización y caché avanzada, así como opciones de seguridad particulares a cada gestor de contenidos (CMS).
Además, los servicios especializados suelen incluir soporte de profesionales expertos en la plataforma para la que están optimizados. Esto puede ser muy útil si tienes problemas con tu sitio y necesitas ayuda de alguien que entienda profundamente la plataforma que estás utilizando.
Por ejemplo, en SiteGround son expertos en WordPress y tienen un plugin que, entre otras muchas cosas, gestiona la memoria caché de tu sitio, te ayuda a optimizar las imágenes que tengas con ellos, y el código de tus páginas web. Todos estos servicios son una gran ayuda y te pueden ahorrar tiempo y dinero. Por cierto, puedes leer mis opiniones de SiteGround para más información.
Elegir el hosting adecuado es una parte esencial de la creación y el mantenimiento de un sitio web exitoso. Como te he venido contando, un buen hosting puede marcar la diferencia entre un sitio web que simplemente “existe” en internet y un sitio web que ofrece experiencias de usuarios notables.
Para terminar, recordemos los puntos clave que hemos cubierto en este artículo:
Un hosting es un servicio que te permite almacenar los contenidos y archivos necesarios para que tu sitio web esté disponible en internet en todo momento. Es un espacio alquilado en un servidor físico, que te lo puedes imaginar como un ordenador muy grande.
Un hosting, o alojamiento web, es el servicio que almacena los archivos y bases de datos de un sitio web en servidores, conectándolos con un dominio para mostrar su contenido. Por ejemplo, un hosting web permite acceder a un sitio desde cualquier dispositivo conectado a una conexión internet.
El uptime, o disponibilidad del hosting se refiere al tiempo durante el cual un servidor de hosting está en funcionamiento y es accesible para los visitantes del sitio web, vamos el tiempo que no tiene interrupciones.
Es importante porque un alto uptime garantiza que tu sitio esté disponible en línea la mayor parte del tiempo, lo que es esencial para la satisfacción de los usuarios y el éxito del sitio.
El hosting web es el espacio donde se almacenan los archivos y datos de un sitio web, permitiendo que esté disponible en línea. Es esencial para la presencia en internet.
Por otro lado, un CDN (Content Delivery Network) es una red de servidores que acelera la entrega de contenido (p.ej., las imágenes) al almacenar copias en caché de recursos estáticos y distribuirlos desde servidores cercanos a los usuarios, mejorando la velocidad de carga.